El diputado local, Omar Bazán presento u a serie de propuestas como su aportación para conformar la ley general de aguas, ordenada en días pasados la Suprema Corte de Justicia de la Nación al Congreso Federal.
Chihuahua.- Lo anterior al deliberar en torno a un cúmulo de controversias constitucionales que impulsamos a través de alcaldes del Partido Revolucionario Institucional.
Por tanto, es de mi interés, sean tomados en cuenta algunos rubros para fortalecer la nueva ley.
Y es que durante el ejercicio legislativo de un servidor, he observado como necesario que se equipare el acceso al agua como un derecho humano, toda vez que las políticas existentes tienden solamente a la sobrerregulación y monopolización del vital líquido.
Atendiendo que el uso irracional del agua en el sector agrícola, es un círculo vicioso en el cual las técnicas utilizadas no son eficientes.
Esto, sumado a que existe un ambiente de indefinición legal; sin que haya mecanismos para priorizar medidas y ordenamientos para el uso eficiente del agua para fines agrícolas, y mucho menos metas medibles para su ahorro.
En síntesis una nueva legislación, debe atender al principio de libre cultivo y sin imponer sistemas de riego obligatorios.
Con lo anterior, se irán generando condiciones para que los productores logren la migración voluntaria a las nuevas tecnologías, una consigna a atender por parte de todos los entes involucrados.
El articulado debe de emitirse, también, bajo la noción de que los órganos jurisdiccionales tengan facultades para sancionar fuertemente a la Comisión Nacional del Agua, en el caso de que omitan establecer las políticas públicas.
La nueva LGA, debe atender a una nueva política de irrigación que atienda al desarrollo sustentable, de satisfacción de las necesidades básicas y aspiraciones de las personas.
Hemos visto que en el estado de Chihuahua, enfrentamos una escasez de agua cíclica y recurrente desde que tengo memoria, pero el deterioro de las aguas superficiales y de los acuíferos ha sido en los recientes años un evidente desastre.
Un motivo de alerta, si consideramos que un cambio climático en ciernes compromete a estay futuras generaciones, con afectaciones en la producción agroalimentaria.
