Hoy las fuerzas de seguridad detuvieron a más de mil 300 personas en Rusia, en protestas que denunciaban la movilización, dijo un grupo de derechos humanos, horas después de que Vladimir Putin ordenara el primer reclutamiento militar de Rusia desde la Segunda Guerra Mundial.
El grupo independiente de monitoreo de protestas OVD-Info dijo que, según la información que recopiló de 38 ciudades rusas, más de mil 311 personas habían sido detenidas al final de la noche.
Afirmaron que esas cifras incluyen al menos 502 en Moscú y 524 en San Petersburgo, la segunda ciudad más poblada de Rusia. Las manifestaciones no autorizadas son ilegales según las leyes antiprotesta de Rusia.
La funcionaria del Ministerio del Interior ruso, Irina Volk, en un comunicado citado por las agencias de noticias rusas, dijo que los oficiales habían interrumpido los intentos de organizar lo que llamaron pequeñas protestas.
“En varias regiones, hubo intentos de realizar acciones no autorizadas que reunieron a un número extremadamente pequeño de participantes”, dijo Volk.
“Todos estos fueron detenidos. Y aquellas personas que violaron las leyes fueron detenidas y llevadas a comisarías para ser investigadas y establecer su responsabilidad”.
El precio de los vuelos de ida fuera de Rusia se disparó y se agotaron rápidamente el miércoles después de que Putin ordenara la convocatoria inmediata de 300.000 reservistas.
El movimiento de oposición Vesna convocó protestas y dijo: “Miles de hombres rusos, nuestros padres, hermanos y esposos, serán arrojados a la picadora de carne de la guerra. ¿Por qué estarán muriendo? ¿Por qué llorarán las madres y los niños?
La oficina del fiscal de Moscú advirtió que organizar o participar en protestas podría conllevar hasta 15 años de prisión. Las autoridades han emitido advertencias similares antes de otras protestas. Las del miércoles fueron las primeras protestas contra la guerra en todo el país desde que comenzaron los combates a fines de febrero.
Periodistas de AFP en el centro de Moscú dijeron que al menos 50 personas fueron detenidas por policías que vestían equipo antidisturbios en una calle comercial principal.
En San Petersburgo, los reporteros de la AFP vieron a la policía rodear a un pequeño grupo de manifestantes y detenerlos uno por uno, subiéndolos a un autobús.
Los manifestantes coreaban “¡No a la movilización!”
“Todo el mundo está asustado. Estoy por la paz y no quiero tener que disparar. Pero salir ahora es muy peligroso, de lo contrario habría mucha más gente”, dijo el manifestante Vasily Fedorov, un estudiante que lleva un símbolo pacifista en el pecho.
“Salí a la manifestación planeando participar, pero parece que ya arrestaron a todos. Este régimen se ha condenado a sí mismo y está destruyendo su juventud”, dijo Alexei, un residente de 60 años que se negó a dar su apellido.
“¿Por qué estás sirviendo a Putin, un hombre que ha estado en el poder durante 20 años?” un joven manifestante le gritó a un policía.
“Vine a decir que estoy en contra de la guerra y la movilización”, dijo a la AFP la estudiante Oksana Sidorenko. “¿Por qué están decidiendo mi futuro por mí? Tengo miedo por mí, por mi hermano”, agregó.
Alina Skvortsova, de 20 años, dijo que esperaba que los rusos comprendieran pronto la naturaleza de la ofensiva del Kremlin en la vecina Ucrania . “Tan pronto como realmente entiendan, saldrán a la calle, a pesar del miedo”, dijo.
En Ekaterimburgo, la cuarta ciudad más grande de Rusia, la policía subió a autobuses a algunos de los 40 manifestantes que fueron detenidos en una manifestación contra la guerra. Una mujer en silla de ruedas gritó, refiriéndose al presidente ruso: “Maldito ‘chiflado’ calvo. Nos va a tirar una bomba y todos lo seguiremos protegiendo. He dicho suficiente”.
La agencia de noticias Interfax citó al Ministerio del Interior ruso diciendo que había anulado los intentos de “organizar reuniones no autorizadas”.
Todas las manifestaciones fueron detenidas y aquellos que cometieron “violaciones” fueron arrestados y llevados por la policía en espera de una investigación y enjuiciamiento, agregó.
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